DECLARACION
DE IXIMCHE: III CUMBRE CONTINENTAL DE PUEBLOS Y NACIONALIDADES INDIGENAS DE ABYA
YALA
1ro
de abril de 2007
Nosotros
y nosotras, hijos e hijas de los pueblos y nacionalidades indígenas originarias
del continente, autoconvocados y reunidos en la III Cumbre Continental de
Pueblos y Nacionalidades Indígenas del Abya Yala realizado en Iximche’,
Guatemala, los días oxlajuj Aq’abal, trece fuerzas del espíritu del
amanecer, 26 al kají kej, cuatro fuerzas del espíritu del Venado, 30 de marzo
del 2007:
Reafirmamos
la Declaración de Teotihuacan (México, 2000) y la Declaración de Kito
(Ecuador, 2004); ratificamos nuestros principios milenarios, complementariedad,
reciprocidad y dualidad, y nuestra lucha por el derecho al territorio, la Madre
Naturaleza, la autonomía y libre determinación de los pueblos indígenas; y
anunciamos el resurgimiento continental del Pachacutik (retorno), al cierre del
Oxlajuj Baq’tun, cuenta larga de 5,200 años, acercándonos a las puertas del
nuevo Baq’tun encaminándonos para hacer del Abya Yala una “tierra llena de
vida”.
Vivimos
siglos de colonización, y hoy la imposición de políticas neoliberales,
llamadas de globalización, que continúan llevando al despojo y saqueo de
nuestros territorios, apoderándose de todos los espacios y medios de vida de
los pueblos indígenas, causando la degradación de la Madre Naturaleza, la
pobreza y migración, por la sistemática intervención en la soberanía de los
pueblos por empresas transnacionales en complicidad con los gobiernos.
Nos
prepararnos para recibir y afrontar los desafíos que nos demanda los nuevos
tiempos, por tanto declaramos:
Afianzar
el proceso de alianzas entre los pueblos indígenas, de pueblos indígenas y los
movimientos sociales del continente y del mundo que permitan enfrentar las políticas
neoliberales y todas las formas de opresión.
Responsabilizar
a los gobiernos por el permanente despojo de los territorios y la extinción de
los pueblos indígenas del continente, a partir de prácticas impunes de
genocidio de las transnacionales, así como por la poca voluntad de las Naciones
Unidas en viabilizar la Declaración de los Derechos de los Pueblos Indígenas y
por no garantizar el respeto pleno de la Declaración Universal de los Derechos
Humanos.
Ratificar
nuestro derecho ancestral e histórico al territorio y a los bienes comunes de
la Madre Naturaleza, y reafirmamos su carácter inalienable, imprescriptible,
inembargable e irrenunciable, aún a costa de nuestras vidas.
Consolidar
los procesos impulsados para fortalecer la refundación de los Estados – nación
y la construcción de los Estados plurinacionales y sociedades interculturales a
través de las Asambleas Constituyentes con representación directa de los
pueblos y nacionalidades indígenas.
Avanzar
en el ejercicio del derecho a la autonomía y libre determinación de los
pueblos indígenas, aún sin el reconocimiento legal de los Estados – nación.
Ratificar
el rechazo a los tratados de libre comercio (TLCs) que vulneran la soberanía de
los pueblos y mantener la vigilancia ante los intentos por implementar nuevos
tratados comerciales.
Reafirmar
nuestra decisión de defender la soberanía alimentaría y la lucha contra los
transgenicos, convocando a todos los pueblos del mundo a sumarse a esta causa
para garantizar nuestro futuro.
Ratificar
la lucha por la democratización de la comunicación y la implementación de políticas
públicas que contemplen disposiciones especificas para los pueblos indígenas e
impulso de la interculturalidad.
Alertar
a los pueblos indígenas sobre las políticas del BID, Banco Mundial y entidades
afines para penetrar en las comunidades con acciones asistencialistas y de
cooptación que apuntan a la desarticulación de las organizaciones autónomas y
legitimas.
Para
el vivir bien de los pueblos indígenas, acordamos:
Exigir
a las instituciones financieras internacionales y los gobiernos la cancelación
de sus políticas de promoción de las concesiones (mineras, petroleras,
forestales, gasiferas y de agua) de territorio indígenas para las industrias
extractivas.
Condenar
las políticas del presidente Bush y del gobierno de Estados Unidos expresadas
en la exclusión demostrada con la construcción del muro en la frontera con México
mientras por otro lado trata de apropiarse de los bienes comunes de la Madre
Naturaleza de todos los pueblos del Abya Yala, implementando planes y acciones
expansionistas y guerreristas.
Condenar
la actitud intolerante de los gobiernos de los Estados – nación que no
reconocen los derechos de los pueblos indígenas, en particular a los que no han
ratificado ni garantizan la aplicación del Convenio 169 de la OIT.
Condenar
las democracias impostoras y terroristas implementadas por los gobiernos
neoliberales, que se traducen en la militarización de los territorios indígenas,
la criminalización de las luchas indígenas y movimientos sociales en todo el
Abya Yala.
Para
hacer caminar la palabra y realizar los sueños, de la resistencia al poder:
Nos
constituimos en la Coordinadora Continental de las Nacionalidades y Pueblos Indígenas
del Abya Yala, como espacio permanente de enlace e intercambio, donde converjan
experiencias y propuestas, para que juntos enfrentemos las políticas de
globalización neoliberal y luchar por la liberación definitiva de nuestros
pueblos hermanos, de la madre tierra, del territorio, del agua y todo el
patrimonio natural para vivir bien.
En
este proceso delineamos las siguientes acciones:
Fortalecer
el proceso organizativo y de lucha de los pueblos indígenas con la participación
de las mujeres, niños y jóvenes.
Convocar
a la Cumbre Continental de Mujeres Indígenas del Abya Yala y a la Cumbre
Continental de la Niñez, Adolescencia y Juventud de las Nacionalidades del Abya
Yala.
Convocar
a la marcha continental de los pueblos indígenas para salvar a la Madre
Naturaleza de los desastres que está provocando el capitalismo, y que se
manifiesta en el calentamiento global, a realizarse el 12 de octubre del 2007.
Impulsar
la misión diplomática de los pueblos indígenas para defender y garantizar los
derechos de los pueblos indígenas.
Respaldar
la candidatura a Premio Nobel de la Paz de nuestro hermano Evo Morales Ayma,
Presidente de Bolivia.
Exigir
la despenalización de la hoja de coca.
“Soñamos
nuestro pasado y recordamos nuestro futuro”
Iximche’,
Guatemala, marzo 30 de 2007.
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