“Quienes conocen nuestra historia saben que fuerza y fragilidad han ido inseparables y que de otra manera no se puede explicar cómo esta nación ha resistido tantas calamidades a través de los tiempos. En el sigo XVIII su capital fue totalmente destruida dos veces, ha vivido los regímenes coloniales más brutales y los dictatoriales más sanguinarios de la región y sus niveles de pobreza no tienen parangón en el continente, pero aquí estamos y no partiendo de cero como dicen algunos.”
Esa mujer que es fundadora de EnfoFanm en 1987 formando equipo con Myriam Merlet, Danielle Magliore y Rachel Beauvoir-Dominique, entre tantas otras, sugiere que la recuperación de las raíces de la memoria histórica es indispensable para saber que no se parte de la nada aunque el terremoto les haya dejado con poco. Esas raíces están en algunos libros, en el periódico que la organización Ayti Fanm desde 1991, además de que permanece en la narrativa oral de las nuevas generaciones de activistas y en los archivos de la organización, presentemente enterrados en el destruido local.
Zéphir ha celebrado que el conjunto de las organizaciones de mujeres haitianas y el Campamento Internacional Feminista hayan definido como una de sus líneas fundamentales la recuperación de la memoria histórica. Celebra también que las periodistas y comunicadoras de la región se hayan comprometido a apoyar esa iniciativa desenterrando de sus propios archivos todo lo que han producido desde las voces de las mujeres de Haití en las últimas décadas.
Resalta que la gran oportunidad para América Latina y El Caribe con relación a Haití es la de romper el aislamiento histórico que ha existido con relación a su país. Destaca que la lucha por los derechos de las mujeres participando en la refundación de Haití es una prioridad indispensable porque “el espejismo de la libertad en la vida cotidiana no nos deja ver la necesidad de estar en los órganos de decisión.“
Las amenazas a los derechos de las mujeres desde el estado no son inventadas. El jueves 4 de febrero el senador del Departamento de la Grand Anse Riché Andrisse dio declaraciones públicas a la prensa planteando que el Ministerio de la Condición Femenina debía convertirse en un Ministerio de la Familia.
Sugiere que “hay que repensar la globalidad del movimiento en Haití en este momento y hay que replantear nuestra forma de hacer política.“
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