Cobertura
Especial PAM:
15 días de gloria10 años de backlash* por
María Suárez Toro, RIF/FIRE Ella
es una sobreviviente de los embates de los fundamentalismos.* Esos que han
querido erosionar el régimen de los derechos humanos. Por ejemplo, el
derecho mismo de las mujeres a tener derechos.
Ella es una sobreviviente de todas las guerras de la última década.
Las declaradas, como la guerra en Afganistán, la guerra en Irak, la
guerra en Colombia y la de Somalia. Pero ha sobrevivido además la III
guerra mundial. Ella
es la Plataforma de Acción (PAM) de la IV Conferencia Mundial de la ONU
sobre la Mujer, redactada y adoptada en los difíciles, disputados, pero
gloriosos 15 días de 1995 en
Beijing y en Huairou en China. En ocasión de su venida al mundo, fue
celebrada por sus madres-parteras: el movimiento mundial feminista y de
mujeres, porque aunque fuera un parto que no contemplaba todo lo que ellas
querían, podía ser el nacimiento de un proceso. Fue adoptada por los
Estados miembros, quienes la recibieron con beneplácitos, declarados con
bombos y platillos hasta por la prensa en esos días de gloria, hasta que
empezó a crecer con dinámica propia. Como las mujeres: que todo el mundo
las "quiere" hasta que se liberan y crecen desde adentro. Y
sus dos semanas de gloria, fueron seguidos por 10 años de backlash*.
Ella no ha conocido ni la paz, ni la justicia, ni el laicismo político,
cultural y social que parte del marco de los derechos humanos.
Gina Vargas dijo en la reunión consultiva del 17 de febrero,
organizada por la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la
Mujer con las Organizaciones no Gubernamentales, que "llegamos
a Beijing mas 10 con tres fuerzas globales en alianza y actuando en contra
de la democracia, de las mujeres, de los hombres, de la diferencia, de la
sexualidad, de la vida digna, acentuando
las discriminaciones étnicas, de raza, orientación sexual,
acentuando la pobreza y la
exclusión, arrastrándonos a una demencial lógica guerrerista: estas
fuerzas son la globalización neoliberal, el militarismo y los
fundamentalismos. Ella
es una sobreviviente, que sobrevive porque a pesar de los embates, o para
enfrentarlos, se ha ido a refugiar en los movimentos feministas y de
mujeres, y porque sabe que ella misma no es completa sin otros derechos.
"...la Conferencia de Beijing dejó un instrumento muy valioso, la
PAM, que expresa una agenda política muy concreta frente a los gobiernos
y a la sociedad civil: lograr que los gobiernos conviertan en políticas,
con mecanismos y recursos, los acuerdos y recomendaciones
del la PAM. Y eso ha sido indudablemente un logro democrático de
primer orden. Pero la agenda de los feminismos va mas allá que la de los
gobiernos, incorporando la PAM y al mismo tiempo, levantando aquellos
temas de las agendas feministas globales que no quedaron incorporados, al
menos no en su dimensión necesaria. Los asuntos de justicia económica y
los asuntos del cuerpo, incluyendo el derecho a la libre determinación,
al aborto, a la libre orientación sexual, por señalar los mas
conflictivos de ese entonces y que siguen siendo los mas conflictivos
ahora. Beijing tuvo esa
característica particular para el movimiento feminista que participaba en
él. Fue concebido desde una doble estrategia
que se sustentó en
una convicción política: la agenda política de las mujeres, compartida
entre estado y sociedad civil que no agota las acciones y las propuestas
de las mujeres y sus movimientos. " Un
balance sobre la aplicación de la PAM en la región latinoamericana y del
Caribe, da cuenta de luces y sombras que bien ejemplifican un backlash.
Dice Gina que es indudable que han existido avances en estos diez años,
y los señala. "Todos los países cuentan con legislaciones que
establecen la igualdad entre mujeres y hombres, existe una significativa
normatividad nacional, regional y global
con relación a violencia contra las mujeres. Existen en casi todos
los países políticas de afirmación positiva, que buscan acortar las
brechas ciudadanas entre mujeres y hombres. Todos los países tienen
maquinarias estatales a favor de la mujer. Los gobiernos han informado de
sus avances y dificultades, lo
que ha dado lugar a los Reportes Sombra, que han sido una forma importante
de fiscalización por parte de las organizaciones de mujeres." Pero,
en el marco de esos logros, muchas dimensiones han empeorado. "La
ciudadanía social económica de las mujeres continua siendo la mas
devaluada en todas sus dimensiones; la mayoría de las maquinarias
estatales tiene pocos recursos y no tienen capacidad ni mandato de
transversalidad y, cuando no están posicionada como política de estado,
están sujetas a todos los retrocesos que provocan embates
conservadores; los derechos reproductivos y sexuales siguen siendo los mas
resistidos especialmente ahora con el avance de los fundamentalismos. El
aborto, la orientación sexual, con toda la
riqueza que esta poniendo su diversidad, siguen fuera de las
agendas democráticas. Hay un
clima de retrocesos, y no es cierto que los cambios sean
irreversibles." Según
el análisis de Gina, es tan amenazante el ambiente con el que llegamos a
esta reunión de Beijing mas diez, que
no será posible - para no poner en riesgo lo explícitamente logrado-
ampliarla con lo ya conquistado subjetivamente en estos diez años; con lo
que han ido dejando otras conferencias como la del racismo; o perfilar
mejores recomendaciones frente a las actuales amenazas que, si bien se
vislumbraban hace 10 años, no tenían en ese entonces la fuerza virulenta
que les da el actual poder unilateral de USA y sus aliados, así como las
instituciones globales que, siendo parte de NNUU, son poderes autónomos
que legitiman el neoliberalismo, el militarismo y los fundamentalismos.
La agenda de la PAM esta repolitizada desde los movimientos
feministas y de mujeres, no así desde los estados ni desde la debilitada
NNUU. Más que
nunca, por eso, sigue siendo valida esta doble estrategia que ha
acompañado los movimientos feministas y de mujeres en esta década:
defender la PAM, disputando su
concreción a nivel local, nacional y global, al mismo tiempo que
se avanza en perfilar y luchar por los derechos que ahora emergen y
aquellos que estamos perdiendo, confrontando a la vez estas tres fuerzas
que tratan, por todos los medios, de impedirlo.
Y en todo este proceso de los 10 años, algo también ha cambiado
en los movimientos feministas y de mujeres, por ejemplo el recuperar su
capacidad de articulación, el poner en disputa sus agendas desdibujadas
en el largo proceso post Beijing... Esta reunión de Beijing mas diez es
una vuelta a recuperar una plataforma que ha sido tan devaluada
y esta tan amenazada por las fuerza fundamentalistas. Y esta vuelta
ha sido un proceso.
Pero es una vuelta diferente. Desde la exigencia que la PAM no se
vea en sí misma. Desde el convencimiento que la PAM no podrá ser
instrumento y herramienta de avance
para las mujeres si se sustenta en una NNUU debilitada, sin poder para
enfrentar las arbitrariedades de USA y aliados, sin una
reforma radical de sus estructuras;
sin el poder de los G7 y el derecho a veto;
sin el poder autónomo de las instituciones financieras; sin
fortalecer la institucionalidad
global de las mujeres, particularmente UNIFEM; sin la participación de la
sociedad civil y la ciudadanía global. Y por supuesto, sin el
Vaticano como
país observador, lo que facilitaría la defensa de estados laicos
como derecho ciudadano,
nacional y global.
Es también una vuelta
que trae la incorporación de otros horizontes globales, como los del Foro
Social Mundial, que discute
en su interior también la reforma
radical de la arquitectura global, la superación del enfoque neoliberal,
la confrontación con el militarismo global, junto con la interacción
intensa con otras múltiples agendas
de transformación de la vida y del mundo de muchos otros movimientos
sociales, redes, organizaciones, campañas, que buscan
construir ese otro mundo posible, sin neoliberalismo, sin
militarismo, sin fundamentalismos. Esas deberían ser por cierto las búsquedas
de NNUU en su nuevo rol. Porque son la única garantía para una efectiva implementación
de la Plataforma de Acción y para su irreversibilidad... Ella
es una sobreviviente que se rehusa a dejarse matar por las fuerzas de la
muerte. Está viva entre las mujeres, en tanto ellas la resignifiquen,
defiendan y la promuevan para que lejos de apenas sobrevivir, cezca con
tantas otras propuestas que apuntan a nuevos pardigmas vitales. *
El término fue acuñado por Maureen Dow, referido a otro tema, otros
tiempos y otros espacios, aplicada por mí a la PAM. *Por
fundamentalismos me refiero al uso político de la religión para
justificar una sola visión del mundo, económica, política, cultural y
social; una sola verdad y una verdad moralista, definida por los hombres
bancos, algosajones, de clase media, sin discapacidades y heterosexuales. *Término
inventado por mí, referido a la autonomía interactiva (acuñada por
Radio Internacional Feminista) para referirnos al tipo de autonomía en la
que está implícita las relaciones, para diferenciarla del individualismo
estricatmente separatista. * Mainstreaming
referida a la política de reducir o eliminar las instancias propias de
mujeres en aras de una "integración" de la perspectiva de género
a todas las políticas, lo que nunca sucede sin que lo empujen instancias
sólidas de mujeres. *backlash
es un término acuñado por la periodistas susan Faludi en su libro con
ese título, que se refiere al efecto de bumerang que sufren las mujeres
cuando se liberan, donde los poderes patriarcales "asumen" sus
reivindicaciones para quitarles el poder. Nota:
para más información ir a www.fire.or.cr o a www.womensmediapool.org Use
esta informaición, dando crédito a RIF/FIRE
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